viernes, 29 de enero de 2010

Mr. J.D. Salinger

Tenía 20 años, estaba recorriendo las oscuras y nubladas calles de mi ciudad, cuando empezó a caer una tormenta, al estar ahí en medio de la calle, busqué refugio en una tienda de libros, casi oculta y desapercibida, entré de curioso a ver el lugar y ojear algunos títulos, el lugar resultó ser bastante grande y tenía secciones muy variadas, desde libros de historia, biografías, ciencia y medicina, hasta una sección que me hizo desear tener mucha pasta aquel día; una sección con puro libros sobre música y rock, vaya, de pura casualidad llevaba unos billetes en el bolsillo y decidí invertirlos en algo para leer, para variar un poco, ya que, en mi larga vida, el leer no ha sido nunca uno de mis hábitos favoritos, aún así, no soy tan ciego para negar que si hay muy buenos autores de la literatura universal que admiro bastante, como ser Tennessee Williams o Truman Capote, mientras estaba en el lugar pregunté por "El guardián entre el centeno" de J.D. Salinger, un libro de fama mundial del que ya habia escuchado hablar varias veces, y tomando en cuenta mis gustos en libros y autores, ya me lo habian recomendado, compré el libro y llegué a mi casa directamente a leerlo y encontrar que era lo que tenía de especial aquella obra de la literatura americana, para mi sorpresa, el libro era bastante accesible y de fácil lectura, una bendición para un tipo como yo que no está acostumbrado a leer y se aburre fácilmente con palabras y términos complicados, la historia también me impresionó al ser tan sencilla, poco a poco fuí vislumbrando esta maravillosa historia y me sentí identificado con el personaje principal, quien además, compartía muchas cosas conmigo, al final de un par de horas terminé el libro sin hacer una pausa, con una enorme satisfacción y un tremendo recuerdo de aquellas aventuras y descubrimientos de un joven estudiante en busqueda de una vida más auténtica, un muchacho que, a distancias tan grandes de tiempo y espacio, logró compartir conmigo algo de ese sentimiento de rebeldía e inconformismo con la sociedad. Hoy, lamentablemente, me enteré que el autor de esta gran obra de la literatura contemporanea, falleció, para los que no conocían a este formidable escritor, aquí les dejo una nota extraida de la página de la ROLLING STONE:

El escritor estadounidense J. D. Salinger, autor de la novela El guardián entre el centeno, un clásico de la literatura moderna universal, murió hoy a los 91 años en su casa en Cornish, en el estado norteamericano de New Hampshire, según informó el canal de TV CNN citando al portavoz del escritor.

Salinger se hizo famoso como literato con El guardián... (1951), en donde cuenta la historia de Holden Caufield, un joven rebelde que realiza un viaje iniciático a Nueva York en donde, entre mil peripecias, se hace una gran pregunta, que domina casi todo el libro: hacia donde van los patos del lago del Central Park en invierno, cuando el agua está congelada. El guardián... fue censurado y prohibido en su época por sus referencias a las drogas y a la prostitución, y ostenta un feo privilegio: Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, tenía un ejemplar de la novela en el momento de su arresto.

Posteriormente vieron la luz los Nueve cuentos (1953), en donde está incluído el relato "Un día perfecto para el pez banana". Allí se cuenta la luna de miel de Seymour Glass, un joven pesimista en extremo, que le transimite sus nociones de vida a una niña en la playa. La saga de la familia Glass siguió con Franny & Zoeey (1961) y Levantad, carpinteros, la vida del tejado / Seymour: una introducción (1963).

Tras la aparición de El guardián..., Salinger se transformó en un recluso en su casa de New Hampshire, e impidió que casi todos los detalles de su vida privada vieran la luz, más allá de biografías como El guardián de los sueños, escrito por su hija Margaret. Sin embargo, y más allá del tono sensacionalista del libro, pudo trascender que el autor posee al menos dos novelas y varios relatos que permanecen inéditos y, según cuenta la leyenda, guardados en un caja fuerte.
Salinger y El guardián... inspiraron varias canciones. La más famosa, "The Catcher in the Rye" de Guns N' Roses; y también "Shadrach" de los Beastie Boys, "Gin Soaked Boy" de The Divine Comedy y "Le Pastie de la Bourgeoisie" de Belle & Sebastian, entre muchas otras.

"No sé por qué hay que dejar de querer a una persona sólo porque se ha muerto. Sobre todo si era cien veces mejor que los que siguen viviendo": una frase de su autoría, que bien puede servir de epitafio. Adiós Holden, adiós a los disfuncionales Glass, a releerlo y a esperar la publicación de esos escritos que no salieron aún. Adiós, Jerome David Salinger.

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