La muerte del CD?

La industria de la música comenzó a dar la espalda a los soportes físicos que la acompañaron desde sus inicios. Si primero fue el vinilo y luego el cassette, ahora internet reclama el trono de un CD que agoniza. Sony, Warner y Universal se preparan para disputar la hegemonía alcanzada por Apple en un abrir y cerrar de ojos.

El iPod, puso en marcha para alimentar sus contenidos un sistema de distribución de canciones a través de internet que rompió las barreras establecidas por la industria. El sitio iTunes permitió que los internautas escogiesen aquellas canciones que más les gustaban y comprarlas sueltas a un precio módico (casi un dólar), lo que ha hecho innecesario pagar por un disco entero. La división musical de Apple se hizo de oro mientras la piratería maltrataba al sector, asfixiado por las descargas ilegales a través de internet y las ventas de CD piratas.

El mercado manda y las discográficas se desprenden del soporte para entrar en la pelea. Sony BMG, Universal Music y Warner Music se han aliado con el portal de internet MySpace, la red de contactos más popular del mundo virtual con más de 30 millones de usuarios, para lanzar un servicio que compita con iTunes en la distribución musical.

El arma de estos tres grandes de la industria será MySpace Music, un área integrada en la web MySpace que nació como un lugar de encuentro de músicos, y que en unos meses permitirá acceder a los innumerables discos de estas discográficas.

"MySpace Music dará acceso al mayor archivo del mundo de contenidos audiovisuales", se asegura en un comunicado conjunto realizado por las discográficas y MySpace.
Las casas de discos entran de lleno en la lucha por la venta online de música a la carta, un negocio en el que los CD no tienen cabida y pasan de ser un sistema de consumo musical a un mero formato digital de almacenamiento de información.

La reconfiguración del sector pasa también por la venta online de discos en formato CD, que aún es la principal vía de comercialización de música en el planeta, a través de webs como Amazon.com que comen cada vez más terreno a las estanterías de los comercios.

Actualmente me resulta muy cómodo y eficaz descargar música de internet en formato mp3 o WMA, con una gran calidad de sonido.

Debo admitir, como fan acérrimo de la música y en particular del Rock, que comprar discos originales es (o al menos era) una de mis costumbres favoritas, pero últimamente acá donde vivo, los precios de los cds originales se dispararon a niveles insanos, lo cuál me obliga a tomar la decisión de preferir comprar discos originales en países como Chile o Argentina, donde en las tiendas de música, AL MENOS, hay ofertas, promociones, descuentos y otras facilidades que permiten comprarte un disco original sin ser un millonario.

Recuerdo que hace como 4 o 5 años, comprar discos originales acá era algo muy barato, de hecho, hasta tenia una tienda preferida, en la calle América, donde iba regularmente, todos los meses, a ver novedades y a comprar discos para mi colección.

Hoy en día me es imposible asistir a una tienda acá en mi ciudad sin reírme (o llorar en el peor de los casos) con los precios de los discos originales, hace unos meses logré comprarme acá un disco original, un disco sin duda muy importante y uno de los mejores, definitivamente algo que valía la pena el precio, finalmente, llegué a mi casa con mi nueva adquisición, asombrado y maravillado con el arte de la tapa, el librito y sus varias fotos con información de cómo lo grabaron, etc.. Todo en un formato y presentación de lujo. Realmente un placer para los ojos y oídos, pero al cabo de unas cuantas horas, entré en cuenta de que me acabo de patinar como 25 dólares en un disco de música, cuando, hay gente en la calle que está mendigando por 2 mangos (!)

Conclusión; solo vale la pena, al menos para mi, comprar los discos que realmente me resulten muy esenciales, SOLO como coleccionista o fan de la música, ya que aquellos temas y discos que realmente adoro, ya los tengo en formato mp3 o en el pen drive, con gran calidad de sonido, y ahorrándome una fortuna en comprar discos originales. No pretendo que algo tan valioso como el disco desaparezca, pero si los que venden discos no se ponen las pilas para mejorar sus estrategias o bajar los precios, pues, van a perder esta guerra. Actualmente me descargué 5 DVDs de The Beatles, incluyendo las caratulas, y me salió un total de 5 dólares todo el laburo y honestamente, estoy muy feliz.